El Movimiento Cocalero Agrario y Ambienta del Putumayo- MOVICCAAP, en reconocimiento a los campesinos como actores que gozan de autonomía territorial y son sujetos políticos de derechos, quienes han puesto en marcha procesos de movilización, interpelando a la sociedad sobre la realidad de miles de campesinos pobres que cultivamos la coca y que exigiendo respuestas más allá de su simple prohibición y opresión. Ponen en conocimiento el siguiente comunicado a la opinión nacional e internacional.
1.Despues de persistir en la necesidad de reanudar la Mesa de Dialogo ante el gobierno nacional, se logró que se convoque para mañana 10 de marzo del año en curso, nuevamente el espacio de dialogo con las comunidades campesinas que hoy sufrimos graves violaciones a los derechos humanos por la erradicación violenta de los cultivos de coca en Putumayo.
2 El Movimiento Cocalero Agrario y Ambienta del Putumayo- MOVICCAAP en procura de propiciar y lograr la unidad entre el campesinado Putumayense y reconociendo la movilización y protesta que en la actualidad se lleva a cabo, a lo largo y ancho del departamento; hemos determinado que La Mesa de Dialogo que se realizará mañana 10 de marzo de 2021, se haga en el Colegio Alvernia en el casco urbano del municipio de Puerto Asís, a las 9:00 a.m.
3. Lo anterior en aras de facilitar a delegados y delegadas de otros sectores rurales aislados social y geográficamente de Puerto Asís como es el sector Puerto Asís- Alea, Piñuña Blanco, Piñuña Negro y de otros municipios del medio y bajo Putumayo, lleguen a Puerto Asís, su participación en la Mesa de Dialogo y entre todos podamos generar estrategias de acción colectiva.
4. En ese sentido solicitamos a las autoridades competentes y organismos nacionales e internacionales velar por la integridad física y seguridad personal de todos los y los campesinos que asistirán a la Mesa de Dialogo y de las comunidades que permanecen en asamblea permanente en sus territorios.
5. Reiteramos la invitación a los Alcaldes del municipio de Puerto Guzmán, Villagarzón, Puerto Caicedo, Puerto Asís, Orito, Valle del Guamuez, San Miguel y Leguizamo, al Gobernador del Putumayo, Centro Poblado de Paz Heiler Mosquera y demás autoridades locales, del orden departamental, nacional e internacional que han sido convocadas a la Mesa de Dialogo.
5. Finalmente queremos manifestar que MOVICCAAP se configura como herramienta central de organización campesina en el marco de nuestro derecho constitucional a organizarnos y bajo el amparo de la Declaración de la ONU sobre los Derechos del Campesinado y del Acuerdo de Paz. Organización social de base a través de la cual buscamos que se reconozca a los campesinos cocaleros, agrarios y ambientales como interlocutores válidos y legítimos, y con ello contrarrestar la estigmatización, tildamiento y tratamiento que hasta ahora el gobierno nacional nos ha dado como delincuentes y criminales, lo que ha puesto en riesgo nuestra vida y la vida de las comunidades en general.
De ahí nuestros esfuerzos de nosotros los campesinos por constituir una organización cocalera, agraria y ambiental que ponga en el centro del debate la forma de enfrentar la lucha contra las drogas, que evidencie el fracaso de las políticas antidrogas centradas en el aspecto represivo y militar. Y sea capaz de proponer una visión de la problemática cocalera fundamentada en el tema del desarrollo y la pobreza en un contexto donde nosotros los campesinos por subsistencia nos vemos en la necesidad de mantener el cultivo, ante la ausencia de planes de desarrollo agrario sustentable en el territorio.
Por eso nuestro desafío por profundizar la complejidad del problema cocalero a nivel regional y a nivel internacional, desde una perspectiva que abarque los procesos políticos, económicos y las dinámicas de los actores sociales.
Dada la complejidad de nuestro territorio por la reconfiguración del conflicto social y armado por el no cumplimiento del acuerdo de paz, esperamos y exigimos que nuestros esfuerzos organizativos iniciales no se vean afectados por ninguna causa que atente su integridad; por el contrario se reconozca y se visibilice nuestros ideales campesinos; se fortalezca nuestra capacidad de cohesión que nos conlleve a construir propuestas desde el seno de las comunidades y a continuar en la defensa de la vida y el territorio, que es nuestro mandato como campesinos que somos.





